Siempre he creído que todas las personas tienen miles de historias que contar, historias que pueden ayudar, influir e inspirar a otras personas.

En toda mi vida no he encontrado a nadie que no quiera narrar sus experiencias, sus vivencias cuando les he preguntado por ellas. Sin embargo, vivimos en un mundo en el que no nos preocupamos por saber del otro de una manera íntima. Nos conformamos con conocer por encima y seguir adelante en una rueda que más parece una carrera que una vida.

Esta sección, en cambio, me brinda la posibilidad de conocer historias contadas desde el corazón y narrarlas con toda mi alma, como se hace todo lo que vale la pena. Hoy, me gustaría que conociéramos juntos a Federico 🐝 Álvarez San Martín, haciendo un alto en el camino para escuchar de verdad, para conocer sinceramente sin prisas, como se merece.

Toda historia comienza siempre por el principio y la tuya no podía ser menos, así que empecemos. ¿Dónde naciste Federico?

Comenzando por el inicio Nací en 1980 en Madrid, concretamente en el edificio que todo madrileño conoce, la maternidad con forma circular de La Paz. Un día de la lotería, el famoso 22 de diciembre. A mi no se me ocurrió otro día para liarla, pero bien. Mi madre tuvo problemas y salió la placenta antes que yo, por lo que era cuestión de minutos que nos pudieran salvar a los dos. Al final estamos aquí los dos, y ella solo se preocupó tras ese pequeño imprevisto, de preguntar “¿en qué ha caído el gordo?” en vez de preguntar por mi… ya se lo he perdonado 😛

Bueno aquel día a tu madre le tocó algo mejor que una lotería, con tu nacimiento!! Y despúes de aquello, ¿qué recuerdos tienes de tu infancia?

Soy el pequeño de dos hermanos. Mi hermana, Yolanda Álvarez San Martín, que también es abeja como nosotros, y yo nos llevábamos y llevamos genial. De niño era tranquilo, responsable y a la vez con mucha imaginación para crear juegos y probar nueva cosas que hacer.

Pasé toda mi infancia siempre en Alcobendas, precisamente donde tenemos la colmena central. A unas calles desde donde estoy escribiendo. Al lado de mis padres y Yoli.

Desde pequeño mis padres me inculcaron valores como el esfuerzo, la constancia y el trabajo ante todo lo que hiciera. Y sobre todo mi padre me recomendaba que diera siempre el máximo y que no me comparase con nadie. Recuerdo como si fuera hoy mismo esas palabras cuando íbamos juntos al Bernabéu. Desde los 9 años socio del Real Madrid, compartíamos domingos. Así que la infancia la podemos catalogar también como blanca…

Y de mi madre recuerdo… muchas cosas. Desde ese fatídico primer día, jejeje, hasta las conversaciones que teníamos de todos los temas. Lo más importante para ella era que fuera siempre sincero y franco con todo.

Ya nos has comentado que de pequeño eras curioso y te encantaba probar cosas nuevas. ¿Qué hobbys tenía el pequeño Federico?

Muchos… jugar con los amigos al fútbol. Lástima que tuve una lesión importante jugando en el instituto. Era cierre en fútbol sala y al quitar el balón a un delantero contrario, me hicieron una entrada en la que me partieron tibia y peroné. Pensaba que era un esguince, pero al ver la cara de mi hermana cuando fue a buscarme, me di cuenta de que eran palabras mayores. Tras eso le cogí un poco de miedo y ya lo veía desde la barrera.

También jugar en temporadas a rol, juegos de consolas y el deporte, destacando la natación y disfrutar en verano de la piscina de mi casa.

Muchos niños sueñan con ser futbolistas, médicos o astronautas, ¿cuáles eran tus sueños en aquella primera época de la vida?

¿Sueños? No recuerdo ninguno. Tal vez disfrutar siempre de lo que hiciera y hacerme Geógrafo, que es lo que me apasionaba desde que veía el tiempo con Maldonado en la tele. Y lo conseguí, Licenciado en Geografía… pero la vida siempre me ha dado muchas vueltas en lo profesional y no ejercido nunca, aunque siempre me he dedicado a lo que me ha gustado. Tal vez por mi afán de investigar y ‘bichear’ con las cosas.

Así que se puede decir que has cumplido con los sueños que tenías desde el inicio de tu historia, no es así?

Sí. Como te he comentado antes Cristina, la formación que quería tener. Ser geógrafo.

Otros como viajar mucho. Bueno lo que he podido por el momento, pero quiero seguir haciéndolo. Al estudiar el globo terráqueo te surge la curiosidad de conocerlo realmente.

Luego más como dedicarme, como te he dicho antes, a lo que siempre me ha gustado.

Ya nos has introducido un poco en el tema, pero creo que tu formación académica es de lo más variada, verdad?

Sí, en eso he dado muchas vueltas. Estudié la Licenciatura de Geografía. Ya sabes porque me decanté por ello. Mi infancia y los mapas y ver el mundo. Mientras que estudiaba la carrera trabajé de socorrista en la piscina de la universidad y me iba formando en el sector deportivo. Soy Entrenador Personal, Entrenador de Natación, Instructor de Actividades Colectivas como Aquafitness o clases tan raras como bicicleta en el agua. ¡¡Que bien lo pasaba…!!

Hice un curso de instructor de Ciclismo Indoor y el profesor me echó el ojo. Me pidió el CV y me llamó. Tras hacer una prueba me contrataron. Era un gimnasio de alto standing en La Moraleja. Allí aplique todo lo que aprendí en la formación, a a vez que acababa formación en Topografía.

Luego me formé en dirección de instalaciones deportivas, a la vez que ‘bicheaba’ con una plataforma no muy conocida por el momento. Un tal Facebook… al final por mi naturaleza de probar y trastear todo, la dirección me planteó gestionar y dirigir la parte digital de la cadena, junto con su web. Así que dí el salto al Marketing y me formé en ello.

¡Vaya! Sigues manteniendo ese espíritu curioso desde niño. Supongo que con el paso de los años, no has pensado nunca que te equivocaste en tu decisión académica.

Pienso que no. O tal vez no hubiera estudiado a nivel carrera Geografía, ya que las salidas profesionales no eran muy halagüeñas, pero como siempre me han dicho mis padres “haz lo que te guste para que disfrutes y no te cueste nada”. Sabias palabras…

¿Qué te parece si dejamos un momento al Federico del pasado y volvemos al presente? Me gustaría saber cómo has cambiado con los años, ¿qué se ha quedado de ti atrás con el paso del tiempo?

Creo que mantengo mi lado divertido. La gente que me conoce más a fondo sabe que tengo mi lado de humor irónico. A lo mejor soy más responsable. La culpa la tiene Óscar, mi peque de 4 años que me da la fuerza para seguir siempre. Y tal vez una cosa muy importante que he visto con el paso de los años, y es dar la importancia justa a las cosas, y sobre todo, si das tu palabra, cúmplela.

En este momento trabajas en beBee, ayudando a la mejora de la experiencia del usuario, pero no siempre ha sido así. ¿Cómo aterrizaste en la colmena?

Mi trayectoria profesional ha estado definida siempre por mis gustos o pasiones. El deporte en la universidad mientras estudiaba. Continué con él cuando trabajé en una cadena de clubs deportivos y mi lado inquieto por descubrir cosas nuevas, me hizo ver beBee, usarlo y conseguir otro sueño, formar parte de él.

Empecé a usar la red social y recibí un email de Javier beBee. Quería conocerme. Fui a la colmena y nos conocimos. Su propuesta inicial fue que me encargara del Producto, lo que hago ahora. Finalmente hablamos para hacer algo en lo que estuviera más cómodo o dominara… probar y probar, a ver si sacamos fallos y errores para que mis compañeros corrijan.

Ya son casi dos años en beBee en los que he aprendido mucho de todos los componentes del equipo. Desde Desarrollo, pasando por Soporte a departamento Comercial… de todo el mundo hay que aprender algo. Y siempre tienes que aprender.

Ahora, como has comentado, estoy dedicado de pleno al usuario y su experiencia en beBee. Mi objetivo es que estén como en casa. Soy todo oídos y ojos para ver lo que pasa y escuchar sus comentarios o peticiones. Aunque a veces no pueda contestarles al instante, siempre hay que darles una respuesta, porque nos debemos a ellos.

Y seguir estudiando y aprendiendo. Nunca hay que parar…

Muchos de nosotr@s ya hemos descubierto muchas de las diferencias entre beBee y otras redes sociales, pero ¿qué es para ti ese plus que hace de beBee algo único?

Antes te he dicho que llegué a beBee tras el mensaje que me envió Javier. La verdad es que desde el primer momento me encantó la red social. Al principio publicaba prácticamente yo solo y los usuarios animados que tenían…

Estoy completamente identificado con el proyecto y con el objetivo y misión de la empresa. Y el hecho que empezar casi desde el principio y habiendo estado en los dos lados, siendo usuario y parte del equipo, hacen que sea muy especial para mi. Ahora puedo “trabajar” en la parte que ocupaba antes, desde dentro. Un auténtico placer formar parte de este gran Equipo.

¿Diferentes a otras plataformas? Claro. beBee es único. En todo mi uso con plataformas de redes sociales no he encontrado una en la que tenga cabida lo que has comido hoy con tus amigos, hasta un artículo técnico de tu profesión que ayude a otros profesionales del sector y que te pueda abrir puertas. En sí podemos decir que es la red social de tu marca, tanto profesional como personal… y nos queda mucho por lograr.

Bueno, como en cualquier vida, el trabajo es importante, pero llega la hora de olvidarse del estrés diario. ¿Cómo consigues evadirte?

Mi desconexión es mi familia. Mi mujer, mi hijo de 4 años y Ludo, mi perro. Intento pasar el tiempo libre que tengo con ellos. Y disfrutar de Chinchón dando con Ludo paseos para relajarme.  

También como deformación profesional me gusta estar enganchado a cualquier hora al móvil. Así que si me escriben, contesto. Aunque parezca lo contrario, me relaja estar conectado e investigar todo lo que pasa en la red o en el mundo digital.  

Hasta aquí la entrevista Federico. Espero que con esto las abejas que forman beBee hayan podido descubrir más sobre ti, de la constancia, el trabajo y el esfuerzo. Porque, por mucho que no lo creamos, cada vida es un cuento gracias por dejarnos entrar hoy en el tuyo!

Instagram @fedealvarezsm