Esto de Internet es algo curioso. Nos permite acercarnos a personas que jamás hubiéramos conocido de otro modo, aproximarnos a esas almas que navegan por la red y lograr sinergias que ni siquiera estaban destinadas a ser.
Estibaliz nació un mes antes de mi primera comunión. Nos separa una generación, una brecha que parece tan pequeña pero que me convierte a mí en una analógica reconvertida mientras ella creció en digital.
Pero ahí está la magia de la red, porque aquí esos 9 años que nos distancian se convierten en nada a la hora de unirnos a ambas en estas letras.
Quizás si te hablo de Estibaliz Ruiz te cueste ubicarla. Es posible que no te venga a la mente esa melena rizada y esos diálogos sin tapujos que hacen de ella una mujer única. Seguramente si te hablo de “La Rizos”, entonces sí. Evocarás inmediatamente su risa contagiosa, su apartado Rosario’s Power y sus recetas caseras.
Cuando la conocí me atrapó por su naturalidad, porque me resultaba un soplo de aire fresco en medio de un mundo que parece cada día más encorsetado en métricas y calendarios editoriales. Y no me confundía.
Desde niña ha sido así, un espíritu libre, rebelde y sociable. Nació en Talavera de la Reina pero fue en la Calle Empedrada de Cebolla, donde pasó su infancia desarrollando su competitividad, gracias a los tazos y los cromos.
La vocación la encontró muy pronto y, ya durante sus primeros pasos en la vida, uno de sus juegos consistía en preparar campañas de publicidad.
La mente siempre nos lleva a aquello que amamos, intenta guiar nuestros pasos a lo que estamos destinados a hacer, y la de Esti le colocó en el camino de aquello que aún ni sabía que se llamaba Marketing.
Pero existía y era mucho más que un juego. Por eso cuando tuvo que elegir qué estudios guiarían su desarrollo profesional, optó por aquello que se acercaba a lo que su voz interior le gritaba que era lo correcto: Comercio Internacional y Marketing.

Durante sus años universitarios, se fue despertando en ella la consciencia de lo que su alma ya sabía: que era la publicidad lo que corría por sus venas. Por eso decidió formarse más a fondo en marketing digital, diseño wordpress, diseño de creatividades o SEO.
Ella, que es libertad, creatividad y aire puro, sabe ahora que su alma clamaba por unos estudios que le hubieran permitido desarrollar al máximo esas capacidades y no los encontró en la carrera que eligió.
Podría haber optado por el camino más corto, pero tuvo que recorrer la ruta más larga para obtener el conocimiento que necesitaba para poder dedicarse a lo que amaba.
Jamás sabremos cómo sería nuestra vida si hubiésemos elegido otra desviación cuando se nos aparece, pero sí podemos saber cómo la ruta elegida nos ha hecho crecer. A Esti el camino la ha cambiado, ha evolucionado gracias a él.
Las decisiones que ha tomado, las dudas que le han acechado, el competitivo mundo en el que vivimos y todas las circunstancias que han moldeado su carácter, han hecho de ella una persona más comprometida consigo misma, que mantiene la autoestima lo suficientemente equilibrada como para creer que puede lograr todo lo que sueñe, y la actitud a punto para luchar por ello.
Así, hace ya 5 años creó su blog (Marketinizate) que se convirtió en su mejor CV, en su carta de presentación en el mundo del Marketing. EstiRizos nació antes del blog, en los labios de sus compañeros de Universidad, pero ha seguido creciendo con ella hasta convertirse en un alter ego que alimenta su Marca Personal.
Esti es una de esas personas que ha logrado vivir de lo que ama, pero no ha sido un logro gratuito. Ha invertido para ello tiempo y esfuerzo. Su mente inquieta le coloca a diario el reto de ponerse un ‘pause’ que ignora demasiado a menudo.
Sin embargo, gracias a esa mentalidad en constante evolución ha surgido Chabuca & Co, su propia agencia creativa en la que vende aquello que a ella le sobra: creatividad en todas sus vertientes, con todos sus procesos.
De su trabajo actual, destaca la importancia que tienen las personas. Cuánto puede aprenderse escuchando abiertamente a los demás y la capacidad de crecimiento de nuestras propias competencias al aplicarlas con otros seres.
Sin embargo, como en todo, hay una parte menos buena que también está relacionada con los otros. En las relaciones interpersonales hay mucho que ganar pero también suponen un enorme reto. Ser capaz de complacer a los clientes, tratar con personas que no nos son gratas, o tener conversaciones que sabemos que no van a agradar, son inevitables en un marco laboral que implica un trato constante con los demás y Esti lo vive a diario.
Su sistema para poder gestionarlo es hacerse capaz de separar la parte profesional de la personal. A pesar de que su alma se implica completamente en cada una de sus acciones y le pone complicado esa separación, con los años relativizar se ha convertido en el mejor modo de sobrellevarlo.
Mientras, su mente vuela hacia esos sueños que tiene desde niña y en el modo de conseguirlos. Nueva York era su meta. Caminar por la ciudad de los rascacielos, impregnarse de sus aromas, sus colores, la vida que emana de sus calles, era algo que ansiaba desde pequeña. Y como todo aquello que se propone, lo logró.
Ahora sus esfuerzos y sus ilusiones están depositados en Chabuca & Co y en hacer de ella una agencia de referencia.
Ella que se construyó a sí misma y sigue reformándose a diario a base de tesón, trabajo y enormes dosis de sentido del humor.
Ella que ha aprendido muy pronto que la esencia de la vida es fluir con ella y caminar hacia donde nos lleve, sin medir cada acción.
Ella que sabe, y mucho, de Marketing, de RRSS y del mundo digital, sabe bien que el camino no va de likes.
Va de soltarse los rizos y atreverse, únicamente a ser.